El podcast de la pasada semana despertó el interés en esta herramienta tan increíble para trabajar con nosotras mismas: el autorretrato.
Y la conversación en Instagram, derivó en preguntas y respuestas que quizás te perdiste, ya que sólo duraron 24 horas en las stories de esta plataforma. Así que hoy, quiero recuperar algunos conceptos importantes que salieron en esa conversación, y hablarte de 3 claves que, para mí, son imprescindibles a la hora de ponerte frente a la cámara.
Si te pica el gusanillo aunque sea un poco, te recomiendo que pruebes. ¿Qué puede pasar? No tiene por qué verlo nadie si así lo deseas, y puedes borrar las fotos si lo que ves no te gusta o no te apetece mirarlo.
Escucha el audio para iniciarte con buen pie:
Si después de escucharlo, tienes la necesidad de coger la cámara y ver qué pasa, no dejes que esas ganas mueran. Coloca tu cámara y déjate llevar frente a ella. No es tan complicado como parece, y el resultado siempre es esclarecedor.
Aprovecha esa energía, ese impulso. El autorretrato del que te hablo nace precisamente desde ahí. Después puede venir la creatividad y un montón de cosas más. Pero lo más básico es las ganas de conocerte, de verte y aceptarte.
Y recuerda no ponerte excusas de la calidad del equipo. Aquí vale cualquier cosa, lo más importante eres tú, y eso ya lo tienes.
Si te animas, yo estaré al otro lado esperando tu foto y tu historia. Puedes etiquetarme en Instagram con @rebecelopeznoval para que pueda ver tu imagen. Estoy segura de que si empiezas, luego no podrás parar.
Pronto te hablaré de la próxima edición de I love Me, pero si quieres estar informada y no perderte nada, apúntate aquí a la lista de correo para que te lleguen todos los podcast directo a tu buzón cada martes.